Edil

El edil[1]​ (en latín, aedilis) fue un magistrado de la Antigua Roma.[2]​ Existían dos cargos llamados edil:

  • Edil curul, cargo al que podían optar los patricios y los plebeyos, nacido a imagen de los ediles plebeyos. Se encargaba, entre otras tareas, de la organización de los juegos, de la vigilancia de pesos y medidas en los mercados, y de resolver los pleitos menores relacionados con el comercio, siempre bajo la supervisión del pretor urbano. Era un escalón del cursus honorum. Eran elegidos por todos los ciudadanos. Fueron instituidos en el año 366 a. C.
  • Edil plebeyo, cargo reservado a las personas de origen plebeyo. Era una concesión política a su clase que les permitía ascender en el cursus honorum a través de un puesto que suponía un menor coste económico, ya que no tenían que pagar la organización de los juegos. Su misión original consistía en atender el mantenimiento de los templos plebeyos a las órdenes de los tribunos de la plebe. Después de las leges Liciniae Sextiae, asumieron funciones similares a las de los ediles curules. Al estar vinculado al tribunado de la plebe, no formaba parte del cursus honorum. Eran elegidos únicamente por los plebeyos. Fueron instituidos por primera vez el año 493 a. C.

La edilidad fue abolida en el siglo III.

Este término se usa actualmente en Uruguay para denominar a los funcionarios electos de las Juntas Departamentales.

  1. Rubio, Jesus Humberto Enriquez (1 de agosto de 2012). San Pablo, Jesucristo Y El Cristianismo (en inglés). Palibrio. ISBN 9781463337414. Consultado el 12 de noviembre de 2015. 
  2. Borrajo, Xosé Avelino Hermida; Martínez, María Cruz López (1 de enero de 2006). Gran diccionario século21: galego/castelán, castelán/galego. Editorial Galaxia. ISBN 9788482893549. Consultado el 12 de noviembre de 2015.